Un grupo de vecinos del distrito de Santa Anita en Perú grabaron las imágenes de una mujer que solicitaba ayuda desde el interior de una unidad vehicular donde habría sido estado siendo víctima de violencia sexual por parte del conductor.
Eran las cinco de la mañana de este último domingo cuando los moradores de la urbanización Sol se despertaron por los gritos y ruidos que provenían desde la vía pública. Cuando se acercaron a las ventanas se dieron cuenta de la presencia de un auto color plomo que llevaba casquete de taxi informó La República.pe
“¡No me toques!” se le escucha decir enérgicamente a la joven que iba en el asiento del copiloto, quien además golpeaba algunas partes del auto y hasta tocó el pito del taxi en reiteradas oportunidades. Según los testigos, el conductor se abalanzó sobre la agraviada y la intentó besar a la fuerza.
Debido a que los gritos de la mujer eran constantes uno de los vecinos decidió lanzar un ladrillo contra el vehículo, lo que generó que el chofer decidiera irse del lugar con rumbo desconocido.
Los vecinos afirman que tanto el acento como la apariencia “bonita” que se podía ver de la mujer eran claros signos que la mujer era venezolana y no peruana.
Todo tiene sentido pues las mujeres venezolanas son constantemente “piropeadas” en Perú, además de agredidas y algunas hasta son raptadas para prostituirlas pues los peruanos prefieren pagar por sexo con venezolanas antes que pagar por peruanas.