Italia prohíbe viajes por el coronavirus

Mientras el gobierno italiano sigue tomando medidas radicales para contener la amenaza de la pandemia, el presidente chino Xi Jinping, visitó la ciudad de Wuhan para demostrar que su país ya tiene la crisis controlada

Italia comenzó el martes a implementar una amplia prohibición sobre los viajes debido al contagio del coronavirus mientras que en China, el descenso en el número de víctimas llevó al presidente a visitar el epicentro del brote y declarar “Definitivamente derrotaremos a esta epidemia”.

La visita del presidente chino Xi Jinping a la ciudad de Wuhan — su primera desde que estalló el brote es la señal más reciente de que China está retornando a la normalidad tras varias semanas en que partes de la población se vieron colocadas en cuarentena. El martes China reportó sólo 19 infecciones nuevas, comparadas con el mes pasado cuando surgían miles por día.

“Gradualmente, todo está volviendo a la normalidad”, declaró Yang Tianxiao, empleado de una empresa financiera en Beijing, donde la municipalidad gradualmente está levantando las restricciones al movimiento de las personas.

Pero en Italia, la situación no era para nada normal. Las restricciones al traslado, antes vigentes para el norte del país, fueron extendidas todo el territorio nacional, y habían policías y soldados vigilando para que las normas se cumplan. Países vecinos como Malta y Austria cerraron sus fronteras con Italia y aerolíneas como British Airways cancelaron todos sus vuelos al país.

“Salganse del norte de Italia si es que están allí. No sabemos por cuánto tiempo las autoridades italianas permitirán la salida”, señaló Erik Broegger Rasmussen, funcionario del Ministerio de Relaciones Exteriores de Dinamarca.

Unas 9,172 personas tienen el virus en Italia y 463 han muerto, y hay quienes vaticinan que la situación sólo empeorará.

“Este es apenas el comienzo”, expresó el doctor Massimo Galli, director del departamento de enfermedades infecciosas en el Hospital Sacco de Milán, donde los viajeros en la principal estación de trenes tenían que firmar formularios certificando su necesidad de desplazarse.

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