El gobierno de Irán está proporcionando personal especializado, diluyentes y otros insumos para producir gasolina en la refinería de Amuay, como parte de un renovado pacto de colaboración, que supone vuelos regulares de la aerolínea sancionada por Estados Unidos, Mahan Air, según un reporte de Bloomberg.
La administración de Nicolás Maduro ha redoblado sus esfuerzos para conseguir combustibles por cualquier vía, bien sea mediante importaciones o a través de acuerdos para restablecer parcialmente el parque refinador, cuya capacidad total de procesamiento es 1.300.000 barriles por día, pero que ahora funciona, en promedio, a menos de 15%.
La refinería de Amuay, parte del Complejo Refinador de Paraguaná (CRP) junto con la planta de Cardón, puede procesar 645.000 barriles/día de crudos.
La nota de la agencia estadounidense señala que, igualmente, los gobiernos de Caracas y Teherán están negociando la importación directa de cargamentos de gasolina, pero tendrían que hacerlo a través de intermediarios y como mecanismo de «ayuda humanitaria», pues ninguno de los dos gobiernos puede operar abiertamente con traders formales.
