Vanesa Rosales, defensora de derechos humanos y maestra en Mérida, acaba de recibir una medida sustitutiva de libertad de arresto domiciliario según confirmó Venus Faddoul, de la ONG Estrógeno 100%.
A través de Radio Fe y Alegría Noticias, Faddoul explicó el contexto. La docente asistió a una adolescente de 13 años en Mérida a abortar, luego de quedar embarazada tras ser violada por un hombre. El hecho y la detención de la educadora ocurrieron en el mes de octubre de 2020.
Contó que la jovencita fue violada en reiteradas oportunidades por el agresor “y además la niña vive en unas condiciones muy precarias, de extrema pobreza, alto grado de desnutrición, y por tanto era poco probable que su embarazo tuviera un final feliz”.
En ese sentido, alegó que incluso la vida de la muchacha se encontraba en peligro. “Sin embargo, no hay en Venezuela una ruta, un protocolo a seguir y queda a expensas del criterio médico. En este caso es una situación muy grave en el marco de los derechos de la mujer”.
A Rosales se le acusa de aborto asistido a terceros, agavillamiento y asociación para delinquir.
“Pero no solo está procesada Vanesa sino también la mamá de la niña por aborto a terceros y agavillamiento”, precisó Faddoul.
Confirmó que ciertamente a la adolescente se le practicó el aborto mediante el protocolo que establece la Organización Mundial de la Salud.
La defensa de la activista alega no solo que se violó en el derecho humanitario internacional sino que además ratifica que la jovencita presentaba un cuadro de salud bastante deteriorado y una situación familiar complicada.
“La mamá tiene ocho muchachos, de los cuales seis son menores de edad”, lo cual representan ser razones para ayudarla a tomar esa decisión de abortar.
También agregó que “en la evaluación médica que se le hizo a la niña se determinó que el útero no estaba maduro, no estaba suficientemente desarrollado. Lo más seguro era que estaba condenada a morir. Era una situación muy difícil si se decidía mantener el desarrollo de ese embarazo”.
Denuncia
Esta es la máxima paradoja en este caso particular. La activista relató que cuando Rosales y la mamá de la joven fueron a poner la denuncia contra el violador “terminaron siendo procesadas como las delincuentes, y eso es un absurdo total”.
Por otro lado, las autoridades judiciales argumentaron que como el hombre no estaba en flagrancia “lo dejaron ir, a pesar de estar detenido desde el mismo día de la audiencia preliminar”.
Al indiciado, Carlos Alberto Terán, se le activó un alerta roja, a través de Interpol, para su captura, según lo confirmase este martes 12 de enero el Fiscal General de la República, Tarek William Saab.
Un caso para debatir
Para Venus Faddoul este doble caso de la violación sexual a una niña y la práctica de un aborto por razones humanitarias, sirven para abrir las puertas de un profundo debate que debe desarrollarse en Venezuela en torno al abordaje de la legalización del aborto.
“Es un momento de hacer un debate claro, sin doble moral, y sobre el cual Venezuela necesita actualizarse legalmente”, apuntó la defensora de Estrógeno 100%.
Recurrió a la reciente decisión que se tomó en Argentina de despenalizar el aborto por las razones mencionadas y otras que privan en este tipo de situaciones.
“Y aquí en Venezuela estamos criminalizando a una defensora de derechos humanos por haber ayudado a una niña que había sido violada”, destacó.
Al final, para este tema y otros que tengan que ver con el ámbito de los derechos humanos, apuesta por el dialogo y la conversación para alcanzar acuerdos.
En ese tono, reprochó lo que viene ocurriendo con activistas de la ONG Azul Positivo, en el Zulia, hecho que calificó como “terrible”.
