
Padres de familia y amigos de los 43 normalistas desaparecidos escuchan hoy, la presentación del Tercer Informe Ayotzinapa en la Secretaría de Gobernación de Ciudad de México (México). Un nuevo informe presentado este lunes por el Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) exhibió más «simulación» en la llamada «verdad histórica» sobre la desaparición de 43 estudiantes de Ayotzinapa el septiembre de 2014 en México, y denunció la ocultación de información. Los integrantes de la Marina mexicana manipularon el basurero de Cocula en donde se encontraban los cadáveres del caso Ayotzinapa, un grupo de estudiantes rurales en Guerrero, México, en septiembre de 2014. El basurero alterado es uno de los principales escenarios del caso según la versión oficial. Este fue el sitio donde los estudiantes de Ayotzinapa fueron asesinados y calcinados por el grupo criminal Guerreros Unidos. Luego, los criminales habrían arrojado los restos a un río cercano.
La denuncia sobre la alteración de la escena del crimen es una revelación presente en el tercer informe del GIEI, presentado este lunes en Ciudad de México. Patrocinado por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, el grupo de expertos ha investigado el caso Ayotzinapa. La primera vez que se cuestionó la versión oficial fue a través del GIEI y el Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF) quienes señalaron que era imposible que el basurero hubiese albergado las llamas necesarias para reducir a cenizas los cuerpos de los 43 estudiantes de Ayotzinapa. El documento además revela que la actual administración a través de la Fiscalía General de la República de México ha dado un “trato degradante y violatorio de derechos humanos” durante los interrogatorios de los más de 50 detenidos por el caso. Las denuncias de torturas eran conocidas durante las investigaciones pero la existencia de numerosos videos, entre 50 y 60 audiovisuales, era desconocida. Los videos los habría grabado el CISEN, el servicio de inteligencia del Estado.
El informe también cuestiona el fallo de las autoridades al hacer seguimiento a los grupos criminales de la zona y a los propios estudiantes lo que terminó en la desaparición forzada del grupo de normalistas. “Por eso resulta difícil comprender cómo y por qué ese seguimiento cesó en horas cruciales, cuando ocurrió la desaparición forzada”, añade el texto. El reporte de la visita de los marines al basurero era desconocido hasta ahora y nunca se reportó en ningún expediente. Pero se informó que un mes después del ataque 12 efectivos de la marina fueron hasta el sitio, la visita quedó documentada en un video que dura cerca de dos horas.
En la grabación, hecha por un drone de la Armada, se observa al grupo de marinos dejar tres bolsas blancas cerca de la zona donde se hizo el hallazgo y poco después iniciar un incendio. Posteriormente, el incendio fue apagado y los marinos se retiraron del lugar sin las bolsas blancas que habían llevado. Un día después de la visita de los marines el grupo informó de que el líder de los investigadores en la época, Tomás Zerón, había acudido al basurero con un detenido. Ese mismo día, un convoy con vehículos de la Marina y de la Fiscalía llegó al basurero junto con un helicóptero. El expediente recoge que ese mismo día, peritos de la Fiscalía empezaron llegaron al sitio, pero no que antes un grupo de marinos hubiera explorado el lugar, sacando y metiendo cosas en una camioneta.
Con información de: https://eltiempolatino.com/