Los bonos asignados por el gobierno de Nicolás Maduro a través del carnet de la patria no mejoran la calidad de vida de los venezolanos.
A comienzos de año, las autoridades del país hicieron un ajuste de 60% en los montos, pero el aumento de las tasas oficial y paralela del dólar los ha pulverizado.
“Los bonos no alcanzan, lo necesario es que se ajuste el salario. Porque a uno en el campo le sacan los ojos”, dijo un agricultor al medio larense La Prensa.
“La plata no rinde. Yo no pierdo tiempo con eso porque no es un beneficio. Deben mejorar condiciones”, agregó una vendedora.
Los nuevos montos quedaron fijados: Hogares de la Patria, entre 43,20 bolívares y 162 bolívares; Economía familiar y escolaridad, en 54 bolívares; Dr. José Gregorio Hernández, en 81 bolívares; Parto humanizado y lactancia materna, en 108 bolívares.
El bono más alto (162 bolívares), tasado hasta este martes al precio del dólar marcado por el Banco Central de Venezuela, ni siquiera llegaba a los 10 dólares.
El economista Naudy Pereira dijo a La Prensa que se necesita que el salario se ajuste a la capacidad de compra para que los beneficiarios tengan la posibilidad de adquirir la Canasta Básica Alimentaria.
Una familia venezolana de cinco personas necesita al menos 53 salarios mínimos para cubrir la Canasta Básica de Alimentos, que en diciembre costó 371 dólares, informó la semana pasada el Observatorio Venezolano de Finanzas.
El experto observó además que los ciudadanos podrían conformarse con el dinero que se les asigna y no se motiven a encontrar empleo. Lo necesario, resaltó, es que produzcan porque, consideró, esos beneficios solo mantienen los índices de pobreza.
