El dirigente político y exdiputado a la Asamblea Nacional (AN), Roberto Enríquez,
enfatizó “el error del Consejo Nacional Electoral (CNE) en presentar resultados
que no se parecen en nada a los levantados al cierre de las mesas de votación, el
pasado 28 d julio”
Emilio Materán / Helayne Pérez Bethelmy
Han transcurrido 25 días de las elecciones presidenciales, y aún no se muestra un
resultado oficial de las actas de votación por parte del CNE. Para hablar acerca de
este tema, el periodista Emilio Materán, entrevistó al abogado y presidente del
partido Copei ODCA, Roberto Enríquez, en su programa “Conversando con
Emilio”.
En dicho espacio, el invitado calificó de “contundente” la participación del
pueblo venezolano, en una demostración de un verdadero ejercicio democrático.
Situación actual de la oposición
Roberto Enríquez mencionó la importancia de los recientes informes de la
Organización de las Naciones Unidas (ONU) y del Centro Cárter, a raíz de lo
observado tras el sufragio del pasado 28 de julio. Al respecto, el político mencionó
que “los informes presentados por el panel de expertos, coinciden en que “la
elección no podría considerarse democrática. Estas son instancias que están más
que calificadas en supervisión de procesos electorales. Es sencillo, se anunció un
resultado del CNE que no se parece en nada a los arrojados en el cierre de las
mesas de votación, y eso fue observado por estas organizaciones.
Definitivamente, el venezolano vivió un momento traumático ese día”, destacó.
La voluntad del pueblo
El exdiputado resaltó que para todas las personas que salieron a ejercer su
derecho al voto el pasado 28 de julio, “no ha sido fácil ver cómo su voluntad no ha
sido respetada. Todos sabían lo que estaba pasando y de pronto el CNE saca una
cosa que no estaba en sintonía con lo que realmente sucedió. Nos tocó estar en el
ojo del huracán. Estoy convencido de que la verdad prevalecerá. Tenemos que
seguir luchando para que se respeten los resultados verdaderos”, reiteró.
Alarmas encendidas
Enríquez señaló que “cuando el Gobierno suspendió las negociaciones en México,
se prendieron las alarmas. María Corina Machado manifestó que tenemos
consciencia para cobrar y hacer valer la decisión del pueblo. También sabemos
que es necesaria una negociación con el Gobierno. Seguimos adelante, a pesar
de todo lo que ha sucedido; amenazas, represiones, etc. Este país se expresó.
Todo nos tiene que obligar a la cohesión política. Mantenernos con firmeza en
defensa de la verdad y el respeto a los derechos humanos”, puntualizó.
Los derechos humanos
Para el invitado, a parte de no reconocer los resultados de las elecciones del
pasado 28 de julio, “el Gobierno continúa violando los derechos humanos en el
país. Están atacando a personas por cosas que según ellos hacen otras
personas. Como en el caso de la periodista, Ana Carolina Guaita, hija de
reconocidos dirigentes copeyanos en La Guaira. Eso me tiene impactado. Estas
barbaridades obligan a exigir que se respeten los derechos humanos,
comenzando por el reconocimiento de los resultados reales en las elecciones.
Estamos claros que es un mandato sagrado hacer respetar la decisión de los
venezolanos”, enfatizó.
Preservar la resistencia
Enríquez explicó que la situación política en nuestro país se debe solucionar de la
mejor manera, ya que “Venezuela está en la entrada de Suramérica, con
características geopolíticas estratégicas».
Es muy difícil que puedan hacer algo parecido a Cuba, será difícil. Lo que buscan es quebrar el ánimo del país.
Eso no sucederá. El venezolano de preservar la resistencia. Estoy convencido que no
dejarán pasar un precedente como éste, porque hacen daño los movimientos
migratorios, entre otras cosas”, agregó.
La pérdida de un legado
Finalmente, Enríquez, al igual que otros dirigentes políticos, no perdió la
oportunidad de resaltar cómo “este Gobierno ha dejado perder el legado de
Chávez. El chavismo fue un movimiento popular muy importante. Cuando Chávez
ganó lo hizo porque contaba con una mayoría considerable. Ese era su mayor
soporte; la gente, la fuerza de esa legitimidad.
El pecado de Maduro es que no mantuvo la legitimidad que obtuvo en su momento Hugo Chávez con el chavismo.
Él está descolocado, porque en un país como Venezuela, un Gobierno no se debe sostener con base en la fuerza y el aparato militar”, resaltó.
“Aquí nadie se rinde”
El político afirmó que “el Gobierno está jugando a aterrorizar al pueblo. Eso lo vive
todo el mundo; desde los barrios hasta dirigentes políticos, vivimos esa sensación
de terror. Se debe derrotar al miedo, sin ser temerarios, pero no debemos dejar
que nos paralicen. Todos debemos tener conciencia y ser más inteligentes, sin
rendirnos. No caeremos en los señuelos del Gobierno. Estamos en un escenario
distinto a los de 2017 y 2019. Ahora hay un tema de voluntad muy poderosa que
no se puede negar. Debemos llegar un acuerdo político que permita una transición
en paz y garantías para todos. Comenzando por hacer que se reconozca la
voluntad expresada por el pueblo venezolano el pasado 28 de julio”, concluyó