Que se libere a los presos políticos, que se despeje de inmediato el calendario electoral para las parlamentarias, que haya una observación internacional fiable con la OEA y la Unión Europea y que cesen los actos de persecución y censura contra quienes disienten del rumbo desastroso que han dado al país, son petitorios que comparten incluso centenares de miles de venezolanos que antes apoyaron la fórmula del presidente Chávez y que ahora quieren la solución pacífica y electoral que los lleve al cambio y al progreso.
La opinión es del diputado de la Asamblea Nacional, Miguel Ángel Rodríguez, quien repudia que una vez más el gobierno acuda a prácticas de irritación máxima al espíritu nacional para tratar de desviar la atención de sus graves resultados de gestión. Asegura que en esto estriba el trato cruel que están recibiendo los presos políticos, particularmente Leopoldo López y Daniel Ceballos.
La irritación, añade Rodríguez, también consiste en depauperar la economía familiar con una inflación y una escasez que están completamente fuera de control y que el gobierno insiste en tildar de guerra económica y cambiaría, cuando por más que recuperen los precios petroleros, no terminan de asignar dólares suficientes al esquema Simad para que por vía de extrema urgencia al menos las importaciones sean por ahora la respuesta a la insuficiencia de alimentos, de medicinas, de repuestos y tantas otras carencias que hoy colman la paciencia de los venezolanos.
Si el mismo gobierno no es capaz de vencer a sus supuestos enemigos, como la guerra económica, los contrabandistas, los bachaqueros y los malandros que aumentaron las cifras de hurtos, robos y asesinatos, entonces -sostiene Rodríguez- debe entender que un 80por ciento de la población ya no lo acompañe y quiera un cambio de rumbo. Pero siguen irritando también con el tema electoral y hasta desoyen ahora a sus propios aliados de gobiernos del continente con lo urgente que resulta decirle a los venezolanos cuándo podrán expresar su opinión en elecciones, recalca el diputado.
Sobre el espectro maligno en que ha querido convertir el gobierno a marcadores como Dólar Today y la tasa de cambio en Cúcuta, Rodríguez denuncia que tales irregularidades devienen de la falta de cumplimiento del Banco Central de Venezuela y en general todo el esquema de finanzas del gobierno al no publicar su información y más bien dejar que terceros marquen las referencias para tener una vez más a quien echarle la culpa mientras pasa el tiempo y no rectifican el rumbo.
Finalmente Miguel Ángel Rodríguez repudió la irritación grave que adelanta el gobierno al perseguir y criminalizar a editores y periodistas que cumplen el deber de informar, mientras los órganos de comunicación que se supone son de todos los venezolanos, se dedican a incitar al odio contra la mayoría de los venezolanos que están a favor de un cambio y a convertir a tales medios en centros de descarada propaganda electoral gobiernera, lo cual constituye -advierte- la comisión de graves delitos según el ordenamiento jurídico venezolano.
