«Sin posibilidad de pagar alquileres, comprar alimentos o medicinas, muchos están en peligro de quedarse sin hogar, o ya están siendo echados de sus refugios», alertó la portavoz de la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur), Andrej Mahecic, manifestando la preocupación del organismo por los migrantes venezolanos en medio de la pandemia.
La Acnur informó que trabaja en la creación de nuevos albergues destinados a los venezolanos en situación de calle en los próximos días y prevén
tener una capacidad para refugiar a 100 personas ante los desalojos que iniciaron en medio del confinamiento por el coronavirus.
Mahecic, explicó que muchos de los refugiados en América Latina viven en zonas fronterizas o urbanas «y han perdido sus empleos en el sector informal, a menudo sin redes de seguridad social». En medio del confinamiento muchos venezolanos se quedaron sin un ingreso para pagar los inmuebles arrendados, lo que obligó a los arrendatarios a desalojar a los inquilinos que habían huido de la crisis humanitaria en el país petrolero.
«El número de venezolanos sin hogar aumenta día a día en Colombia, Brasil, Ecuador, Perú, Chile y Argentina. Algunos de ellos se ven obligados a recurrir a la prostitución, la mendicidad o el comercio ambulante», comentó según lo reseñado por la agencia EFE.
La portavoz del organismo resaltó que se ha registrado un flujo mayor de venezolanos que intentan regresar a su país ante los obstáculos de acogida.
