
El último evento relevante donde la empresa tocó el tema del proceso expropiatorio que enfrentaba en la nación sudamericana fue el 15 de noviembre de 2011
De manera inesperada Gruma, el productor de harina de maíz más grande del mundo, dejó de consolidar sus operaciones de Venezuela en los resultados del primer trimestre de 2013. En su informe financiero enviado a la Bolsa Mexicana de Valores, la firma explica que esto responde al decreto de expropiación de sus activos y al cumplimiento de las disposiciones señaladas en las Normas Internacionales de Información Financiera (NIIF).
«Anunciaron que ya los expropiaron en Venezuela, por lo que ya no consolidan su operación de ese país. Ellos (la administración de Gruma) hablan de que el decreto correspondiente se publicó en la gaceta del gobierno», dijo la analista de Monex Casa de Bolsa, Paola Sotelo.
En el 2012 las subsidiarias venezolanas de Gruma conocidas como Monaca y Demaseca aportaron el 15% de sus ventas consolidadas y el 11% de su flujo operativo (EBITDA, por sus siglas en inglés). El último evento relevante donde Gruma tocó el tema del proceso expropiatorio que enfrentaba en la nación sudamericana fue el 15 de noviembre de 2011.
En expectativas de resultado para ese periodo, la mayoría de los analistas contemplaban todavía los negocios de Venezuela. «Al mandar la utilidad neta y resultados operativos de Monaca y Demaseca a las operaciones discontinuas habla de activos desinvertidos y que en un futuro ya no se van a reflejar», indicó Sotelo.
Para el analista de Ve por Mas Casa de Bolsa, José María Flores, a corto plazo la desincorporación de Venezuela será negativa por el peso de 15% que tenía en las ventas de la empresa. «Queda pendiente el monto final de la compensación que recibirá Gruma por parte del gobierno, dado que esas plantas representan aproximadamente el 10% del activo total y el 9% del capital contable del grupo», indicó.
El comparativo de resultados del periodo enero-marzo de 2013 con el mismo lapso de un año antes (donde no contempla en ambos la operación de Venezuela), reflejó estancamiento en ventas pero crecimientos de 69% en el EBITDA y 149% en la utilidad neta.
El analista de Santander Casa de Bolsa, Luis Miranda, considera que los resultados de la empresa fueron sólidos y destaca la mejora en la rentabilidad ante las eficiencias alcanzadas en el área comercial y las iniciativas en manufactura.
Agencias