Hasta ahora, el sistema de facturación contaba con dos componentes: el fijo, en función del consumo y costo del kilovatio/hora, y uno variable
CARACAS. Desde este 1º de septiembre, las familias venezolanas y los comercios e industrias contarán con una factura por el servicio de electricidad mucho más fácil de leer, por cuanto el Ministerio de Energía Eléctrica eliminó, a través de tres resoluciones, los incentivos y recargos adoptados en 2011 para estimular la reducción de la demanda, con lo que comenzó un proceso de simplificación de la facturación eléctrica en el país.
El esquema de incentivos y recargos, adoptado luego de que el país atravesara una crisis en la generación hidroeléctrica por el fenómeno El Niño, hacía que los usuarios que registraban consumos superiores a una cantidad de kilovatios determinado por regiones tuvieran recargos en sus facturas de entre 10% y 50%, y los que redujeran el consumo tenían un descuento en el mismo porcentaje.
A la vez, en 2011 también se estableció que las empresas que superaran un megavoltioamperio de demanda debían realizar acciones para mantener una reducción de 10% con respecto al consumo que tenían en 2009. Esta normativa se mantiene ahora, pero la resolución 34 del Ministerio publicada esta semana elimina el recargo de 10% que recibían las industrias que incumplieran esta disminución de la demanda eléctrica.
El ministro Jesse Chacón reiteró este viernes que decidieron eliminar este esquema de incentivo y recargo para ir a un proceso de simplificación en el sistema de facturación de la Corporación Eléctrica Nacional (Corpoelec), una empresa del Estado que nació a partir de la fusión de catorce compañías que prestaban el servicio en las distintas regiones del país, cada una con su modelo de facturación.
De esta manera, conviven en el país 168 planes distintos de facturación, que «son inmanejables tanto para los usuarios como para la empresa».
Hasta ahora, el sistema de facturación contaba con dos componentes: el fijo, en función del consumo y costo del kilovatio/hora, y uno variable, que estaba relacionado con la reducción o aumento en el pago dependiendo de si la familia bajaba o incrementaba el consumo.
El objetivo es simplificar el sistema progresivamente, para aplicar en 2014 un sistema único de facturación que reúna diez o quince planes tarifarios, adaptados a cada región y según sectores: residencial, industrial, comercial y público.
Chacón descartó cualquier impacto mayor en los ingresos de la Corporación por la eliminación del esquema de recargos. «No llega ni a 5%», indicó.
El ministro enfatizó que los industriales también resultan favorecidos por cuanto no tendrán un recargo en la factura si no cumplen con la reducción del consumo en 10%. Así, rechazó las críticas de algunos sectores que señalaban que la medida atentaría contra la productividad. «O son ignorantes o quieren utilizar esto políticamente, porque la resolución ya existía. Más bien se beneficia al sector industrial porque se elimina el recargo», reiteró.
Pasivos laborales saldados
Durante una inspección en la planta El Sitio, ubicada en los Valles del Tuy, en el estado Miranda, Chacón comentó que esta semana culminaron el pago de la primera parte de la deuda con los trabajadores de Corpoelec, para lo cual el presidente Nicolás Maduro aprobó 1.500 millones de bolívares.
Actualmente discuten con el Ministerio de Finanzas el mecanismo para establecer el segundo pago, que esperan sea concretado para noviembre. AVN
