La agenda incluye una reunión con su homólogo italiano Giorgio Napolitano y encuentros con el papa Francisco
ROMA. El presidente boliviano Evo Morales inicia este jueves una visita a Italia como parte de su primera gira por Europa, dos meses después del incidente que lo retuvo en ese continente durante casi 14 horas.
La agenda incluye una reunión con su homólogo italiano Giorgio Napolitano y encuentros con el papa Francisco y residentes bolivianos en esa nación.
Sobre su audiencia con el Sumo Pontífice, pactada para el venidero viernes en la Ciudad del Vaticano, Morales dijo tener muchas expectativas, al tiempo que resaltó la reflexión del Santo Padre sobre la teología de la liberación, «para la liberación de los pueblos».
El Presidente boliviano recordó que le informará al Papa sobre la decisión de su Gobierno y del pueblo boliviano de sumarse al ayuno mundial por la paz, anunciada por el Vicario de Roma el domingo último.
Luego de su elección como máxima autoridad de la Iglesia Católica, Francisco y Morales sostuvieron un breve encuentro en Brasil, el pasado agosto, durante la Jornada Mundial de la Juventud.
Previo a su arribo a Italia, el mandatario boliviano realizó encuentros bilaterales con su par de España, Mariano Rajoy, y el de Bielorrusia, Alexander Lukashenko.
«Esas reuniones son importantes para Bolivia porque iremos a reiterarles que nuestra política de contactos con países, no solamente de Europa, sino con América Latina y el Caribe, va a continuar», aclaró Morales en declaraciones a la prensa antes de iniciar su gira por el viejo continente el martes último.
La comitiva boliviana está integrada además, por el ministro de Relaciones Exteriores, David Choquehuanca, y el titular de Defensa, Rubén Saavedra, quienes se reunirán también con sus homólogos italianos.
El dignatario suramericano viajó por última vez a Europa a inicios del pasado julio, y durante su regreso a Bolivia los gobiernos de España, Francia, Italia y Portugal cancelaron temporalmente los permisos de sobrevuelos de su avión por esos territorios, tras acusarlo de transportar en su aeronave al exanalista de la CIA Edward Snowden.
Este incidente causó un impasse diplomático entre Europa y la mayoría de los países de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), que reclamaron una explicación y una disculpa a esas naciones europeas, que fueron ofrecidas.
Agencias