Chacón estaba cerca de llegar a su casa junto a su hermano. Se presume que los asesinos sabían que era policía
El oficial de la Policía Nacional Bolivariana, Yorvin Akejandro Chacón Gil, de 23 años de edad, fue asesinado de dos disparos este domingo cuando conversaba con un hermano y amigos en la vía pública del sector La Peña, calle Poma Rosa, kilómetro 16 de la vía al Junquito.
El funcionario estaba de vacaciones desde el viernes. Actualmente adscrito a la seguridad del Metro de Caracas. Eran las 10:45 de la noche del domingo, dos delincuentes pasaron en una moto y dispararon. Recibió un tiro en la región parietal derecha con salida. Otro disparo lo hirió en un brazo cuando trató de cubrirse.
Chacón no fue el único herido en el hecho. Un hombre identificado como Carlos Luis Silva, recibió un tiro en el brazo izquierdo y otro el pie derecho. El resto de las personas que estaban en el lugar buscaron una ambulancia en la que fueron trasladados hasta el hospital Miguel Pérez Carreño, pero el oficial falleció.
Chacón estaba cerca de llegar a su casa junto a su hermano. Se presume que los asesinos sabían que era policía. Se busca por el crimen a Pedro y Jefferson Roca, quienes presuntamente y según la policía estarían incriminados en el crimen.
Estos dos sujetos conocidos como “Pedrito” y “El Burrito”, estarían vinculados a la muerte de otro polinacional ocurrida el año pasado. En esta ocasión tripulaban una Empire Horse roja en la que huyeron sin dejar rastros.
Iván Chacón, padre del oficial caído, habló desde la morgue de Bello Monte, recordando la calidad humana de su hijo. “Era muy tranquilo, una persona muy honesta y buena; esta es la ley de la vida, le tocó. No sé qué pasó? Si fue para robarle la moto, no se sabe”, indicó.
Chacón cree que la delincuencia ha cobrado niveles insostenibles, al punto de que no existe lugar donde puedas estar exento a ser una víctima más. “Por donde quiera que uno anda hay un peligro. Ya no se puede andar por ahí. Es el problema que estamos viviendo”, dijo.
Consciente de esa realidad, Iván Chacón siempre temió por la vida de su hijo. “A él le gustaba ser policía, me decía que la vida continuaba y que no había problema. Yo varias veces le quise decir para que se saliera porque yo veía que era muy peligroso, pero él estaba tranquilo, le gustaba y lo dejé quieto”, expresó.
El crimen del oficial de la PNB elevó a 74 el número de funcionarios caídos durante el 2013 en la Gran Caracas.
AA