Manuel Rosales, presidente fundador del partido Un Nuevo Tiempo, no pasó por alto la conmemoración de los 304 años de la aparición de la Virgen de La Chiquinquirá y aseguró que siempre está presente por el amor y la fe que siente hacia la patrona espiritual del estado Zulia.
“Como todos los años, mi querido pueblo zuliano, junto con todos nuestros visitantes se unenpara adorar y agradecer a nuestra amada patrona, la Virgen de La Chiquinquirá, por toda la bondad que ha prodigado a los zulianos, al hacerlos gente de honor, digna, valiente, alegre y de gran corazón. Por ello mi alma y mi mente los acompaña en esta gran celebración, orando por la paz, la felicidad y el progreso del Zulia y de toda Venezuela”.
Subrayó el dirigente que la fecha es propicia para que todos los venezolanos reflexionemos y comprendamos que la unión y el diálogo son las acciones indispensables para hacer de Venezuela el país que todos anhelamos.
“Hoy es un día para pedirle a Dios y a La Chinita por la unidad de todos los venezolanos, y que retorne el entendimiento en favor del desarrollo, la prosperidad y la felicidad que tanto merece y añora Venezuela. Mi deseo ferviente es que la Reina Morena abra sus manos milagrosas y toque nuestros corazones para que así comprendamos que trabajando conjuntamente y respetándonos en nuestras diferencias es como podemos sacar adelante a nuestra amada Patria”.
En este sentido, Manuel Rosales subrayó que La Chinita lo inspira a luchar por la democracia y la libertad del pueblo venezolano, y también le otorga fuerzas para seguir avanzando en la larga senda del trabajo por lograr un mejor país.
Al hacer referencia a la inmensa devoción que siente el pueblo zuliano y gran parte de Venezuela por la Virgen de La Chiquinqurá, Manuel Rosales exhortó a trabajar por la preservación del Monumento de La Chinita que se construyó bajo su mandato como gobernador de la entidad, para traducir en una gran infraestructura todo el amor del pueblo zuliano hacia su patrona espiritual.
“El amor infinito por nuestra virgen se expresó en el Monumento religioso más extenso de América del Sur, orgullo de Maracaibo, el Zulia y Venezuela. Una construcción que es icono de la ciudad debe preservarse y quererse en cada uno de sus espacios, por el cariño que sentimos hacia nuestra Virgen de La Chiquinquirá, por nuestra devoción mariana, por nuestra cultura y por nuestro gentilicio.
Rosales recordó que “en la Basílica de La Chinquinquirá reina por siempre, acompañada por la fe y el amor incondicional de su pueblo, la tablita de madera de la Virgen de La Chinita y en nuestros corazones reina nuestra devoción por ella”.
A modo de conclusión, el fundador de UNT reiteró el llamado a la paz y al trabajo por el Zulia y por Venezuela. “Es la hora de la unión y no la de la polarización y el desencuentro. Quienes amamos a La Chinita somos un solo pueblo, porque nos une este fuerte sentimiento de admiración y devoción que le profesamos”.
Nota de Prensa
