
Las amas de casa se las ingenian para sustituir los productos que no hallan en los anaqueles y los que no pueden llevar por falta de efectivo
“O se compra arroz o se llevan caraotas porque todo está tan caro que hay que privarse de ciertos productos en la dieta básica”, declaró Carmen Viloria, vecina del casco central de Los Teques, quien realizaba compras en un supermercado de la localidad.
-Es impresionante lo caro que está todo. Vine con el mismo dinero que hace 15 días y me llevé como cuatro bolsas menos, porque la mercancía que exhiben está carísima y otra brilla por su ausencia. A veces me voy sin harina, otras veces sacrifico las servilletas; pero hay productos de los cuales no se puede prescindir sino cuando la naturaleza mande, como son las toallas sanitarias que subieron una barbaridad.
Este relato está lejos de ser producto de la imaginación de la entrevistada, pues el año 2013 cerró con la inflación en más del 50%, unas de las más altas del mundo, según lo afirmaban diversos economistas, quienes añaden que esta situación ha golpeado el poder de compra de los venezolanos.
A esto se le suma lo que para muchos es un anuncio tácito de devaluación del bolívar: el aumento del 10% del salario básico realizado por el presidente Nicolás Maduro a principios de mes; lo que analistas prevén que impactará en los precios al consumidor en un país que importa casi todos los bienes que consume.
Johana Rodríguez – [email protected]/@michellejrl