
Más de dos semanas tiene un bote de aguas negras en la avenida Bertorelli Cisneros, a la altura de la entrada de la urbanización El Encanto, el cual mantiene en vilo a los habitantes y comerciantes que hacen vida en el sector.
“Esa tubería tiene tiempo rota y el bote de agua aparece y desaparece. Los malos olores de verdad que a veces no se soportan y los de la alcaldía como siempre se hacen los de la vista gorda”, manifestó Trino Velázquez.
Las aguas servidas corren libremente sobre la carpeta asfáltica de dicha arteria vial, por la que circulan diariamente una gran cantidad de personas que corren el riesgo de contraer enfermedades respiratorias, tópicas o estomacales.
“Cuando uno camina por ahí debe tener cuidado de que no lo salpiquen con agua sucia porque toda la calle se llena de agua, parece un río negro”, indicó Patricia Jiménez.
Por su parte, los dueños de los establecimientos comerciales aledaños al lugar se quejan a menudo, ya que los malos olores han causado que las personas no quieran estar por mucho tiempo en la zona, lo que trae como consecuencia que hayan bajado significativamente las ventas.
Francisco Torrealba expresó que su clientela ha dejado de visitar su local como lo hacía anteriormente, pues este grave problema afecta no sólo a los vecinos y comerciantes sino a los visitantes y consumidores.
“Necesitamos que reparen esa tubería de una vez porque todos nos estamos viendo perjudicados, no es posible que a pesar de las denuncias que hemos hecho sobre el caso no nos hayan prestado atención”, expresó Torrealba.
Ronald Gil- [email protected] / @thedaniels21