Lugareños viven de cola en cola en la búsqueda constante de los artículos que escasean en los anaqueles, ayer se vendió harina de maíz precocido, margarina y mayonesa en un comercio ubicado en la avenida La Hoyada; en otro de la calle Miquilén también hubo harina.
Desde horas de la mañana los compradores se apostaron a las afueras del mencionado establecimiento a la espera de que abriera sus puertas, una vez iniciadas las operaciones los clientes entraron al recinto de 10 en 10.
Para la ocasión se vendieron cuatro kilos de harina de maíz por consumidor a un costo regulado de 7,41 bolívares, dos recipientes de mayonesa en Bs. 22 cada uno y dos margarinas de 500 gramos en 17,30 bolívares.
La extensa fila perduró hasta horas de la tarde cuando la mercancía dispuesta para la venta se agotó, algunos compradores manifestaron su molestia al no poder llevar los escasos productos.
Luís Gonzáles: “ En esta ocasión pude comprar harina de maíz y mayonesa, tenía tiempo sin adquirir esta última.”
Pedro Ferreira: “ Da la impresión de que la escasez ha golpeado con más fuerza durante los primeros meses del 2014, ya tengo harina en la casa, pero siempre es bueno tener algo guardado.”
Teresa Nieto:” Recientemente he comprado con sobreprecio en bodegas cerca de mi comunidad, es un golpe al bolsillo; pero no tengo tiempo para perderlo en una cola, estoy haciendo esta porque no está tan larga y necesito harina.”
Especuladores activos
Ante la grave escasez los comerciantes más vivos han decidido adquirir los productos con deficiencias en la distribución a un precio regulado y venderlos con sobreprecio de hasta más del 100 %, son múltiples las denuncias que hacen los compradores que no tienen más opción que recurrir a los oportunistas ante la desolación de los anaqueles de mercados locales.
Comerciantes informales ubicados en las avenidas La Hoyada y Bermúdez, así como pequeños abastos en comunidades aledañas son constantemente señalados como especuladores, “me vendieron la harina de maíz en 25 bolívares el kilo, la gente les compra por no tener otra opción, deberían hacer algo”, dijo una dama que quiso permanecer anónima, mientras realizaba una cola para comprar alimentos.
Samuel Pérez / @Samuelgpf
