En Cañaveral y Sabaneta, pertenecientes a El Tigrito de Lagunetica, los lugareños pasan “las de Caín”, carecen de los servicios que les permitan vivir dignamente.
La carretera es el problema principal de los residentes, de donde se deriva el resto de los contratiempos; por tal motivo, manifestaron desespero al no ser tomados en cuenta por los entes gubernamentales.
La comunidad fue fundada hace aproximadamente 50 años según informó uno de los vecinos, desde entonces no han contado con vialidad asfaltada, por lo que deben transitar por una de tierra.
Esta situación ha dificultado el paso de algunos vehículos, por lo que la mayoría de los moradores de Cañaveral y Sabaneta que cuentan con vehículos son carros rústicos, mientras que otros deben caminar durante varios minutos para tomar el transporte público que no entra a la localidad.
“La calle es de tierra, hemos acudido a entes como la alcaldía y la gobernación y nos ha tocado como consejo comunal de estos dos sectores asumir la reparación de algunos tramos de la vía”, expresó José Mercado, quien forma parte del Consejo Comunal Pedro Barrios.
Sin transporte público
Un largo recorrido deben hacer los habitantes de estos sectores para entrar y salir de los mismos, esto se debe a las precarias condiciones en las que se encuentra la vialidad.
Los lugareños diariamente están obligados a padecer múltiples penurias recorriendo unos cuantos metros para llegar hasta la parada más cercana y abordar una unidad de transporte público que los lleve a sus destinos.
En la zona es muy difícil que los taxistas acepten entrar debido a las condiciones de la carretera, “los servicios de taxi son casi imposibles aquí por el deterioro de la vía, si vamos a Cañaveral que es un poco más abajo es complicado ya que es una bajada y la vía está aun más deteriorada, por lo que es difícil para cualquiera que tenga una emergencia salir”, manifestó el vecino.
Durante años los habitantes de esta localidad han deseado la incorporación de algunas unidades de transporte que cubran la ruta hacia el sector, ya que en este lugar habita un gran número de familias y estudiantes que requieren de este servicio para dirigirse hacia otros lugares más poblados o ir a sus sitios de estudio.
Inseguridad
En el sitio los moradores han sido victimas de secuestros y robos debido a que la inseguridad es cada vez mayor, aseguran que carecen de patrullaje policial en horario diurno y nocturno.
“Como en otras comunidades, hemos sido afectados por personas ajenas que se han acercado a cometer actos vandálicos; muchachos que andan en moto y nadie les puede hacer nada”, aseveró.
El representante del consejo comunal expresó que por el lado de Sabaneta han desvalijado vehículos ya que es el sector más solitario y se presta para que los delincuentes comentan sus fechorías.
“La policía no ha hecho nada hasta los momentos y lamentablemente sigue ausente, en algunas ocasiones cuando hemos sido victimas del hampa nos acercamos hasta el comando más cercano y nos dicen que no cuentan con unidades para dirigirse hasta acá”, indicó Mercado.
Lugareños desconocen si en la localidad cuentan con algún cuadrante ya que aseguran que siempre han estado solos y no cuentan con seguridad alguna.
Recolección de basura brilla por su ausencia
Como en cualquier otra comunidad del municipio Guaicaipuro, uno de los contratiempos que padecen los habitantes de Cañaveral y Sabaneta en El Tigrito es la recolección de desechos sólidos.
Mercado acotó que los camiones que se encargan de llevarse los desperdicios tienen años sin pasar por la zona, “soy propietario de una vivienda aquí desde hace cinco años; antes venían aunque había que estar detrás de ellos, pero ya ni eso”.
El vecino explicó que debe cargar con sus bolsas de basura en un vehìculo y dirigirse hasta unos contenedores ubicados en el Mercado Municipal El Paso.
Asimismo indicó que los habitantes del sector han tenido que dar la pelea ya que muchas personas de otras comunidades se acercaban al sector a dejar sus desperdicios y hasta a descargar camiones repletos de escombros.
“Como consejo comunal colocamos carteles y tratamos de que la gente tomara conciencia y ha bajado un poco la cantidad de basura que colocaban a orillas de la vía, lo que generaba malos olores; por supuesto nunca faltan personas inescrupulosas que lanzan sus desperdicios a un lado del camino”.
Rogando por agua
Hemos notado desde mediados del año pasado que el agua ha mermado considerablemente, aunque contamos con una tubería de dos pulgadas no nos llega el servicio con regularidad sino dos o tres veces por semana.
En este sentido, manifestó que no saben si la situación se debe a problemas con Hidrocapital o con algunos invasores que han realizado conexiones ilegales restando agua a algunos vecinos.
“Esto está creando problemas adicionales en los habitantes porque hay una cierta rivalidad entre los lugareños que piensan que el agua se la está llevando uno u otro”, afirmó.
Escaso alumbrado público
Adicionalmente a los problemas antes mencionados, esta comunidad rural también sufre con el alumbrado público.
Los postes de luz solo alcanzan para la mitad del sector, por lo que la otra parte que se encuentra más alejada no cuenta con alumbrado y carece de transformadores.
“Los vecinos de abajo no pueden tener dos electrodomésticos prendidos porque la luz no alcanza, la nevera y el televisor no pueden estar encendidos al mismo tiempo. Estamos buscando la manera de reunirnos con la Mesa Técnica de Corpoelec para tratar el proyecto de electrificación”, explicó Mercado.
Los habitantes de esta comunidad rural de Lagunetica esperan que algún ente resuelva sus necesidades lo antes posible.
Kelly Rodríguez
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