Acechados. Así se encuentran los periodistas en el cumplimiento de su deber desde febrero, cuando se desató una oleada de protestas en el país donde no sólo han resultado agraviados estudiantes.
Según el más reciente informe del Observatorio Venezolano de Conflictividad Social (OVCS) y el Instituto Prensa y Sociedad Venezuela (IPYS Venezuela) entre febrero, marzo y abril de 2014 se han perpetrado 48 ataques a periodistas y medios de comunicación por parte de agrupaciones paramilitares.
Las arremetidas se enmarcan en un ambiente de alta conflictividad, donde solo durante el primer trimestre de 2014 las protestas aumentaron 550 % con respecto al mismo período de 2013, según el balance difundido.
El estudio realizado revela que Caracas encabeza el listado de las ciudades donde se ha han realizado más acciones en contra de los trabajadores de los medios de comunicación social tanto nacionales como extranjeros.
“El Área Metropolitana de Caracas se consolidó como la entidad donde los grupos paramilitares actuaron con mayor impunidad contra periodistas y sedes de medios privados e independientes. El 52 % de los ataques fue en la capital de la República”, refiere el documento difundido.
En Caracas se reportaron 23 afectados. Hubo también 9 víctimas en el estado Bolívar; 3 en Lara; 3 en Zulia, 2 en Táchira; 2 en Apure, 2 en Monagas; 1 en Mérida; 1 en Carabobo y 1 en Portuguesa, siendo protagonizadas las agresiones por colectivos armados que recurrieron a prácticas diversas orientadas a presionar e incentivar el miedo entre el gremio periodístico para evitar la cobertura de los conflictos.
Entre los hechos más graves de estos grupos contra periodistas se registró el secuestro de una periodista del canal de televisión Globovisión. Además, ocurrieron prácticas de intimidación y persecución, agresiones físicas, amenazas de muerte, robo de información, daños a las herramientas de trabajo y a la infraestructura de medios de comunicación.
Fotógrafos en la mira
El eje altomirandino no es ajeno a las embestidas contra los trabajadores de la prensa en el marco de las protestas. El 7 de mayo fue colocada una barricada en el kilómetro 20 de la carretera Panamericana, lo que provocó la movilización de efectivos castrenses, quienes agredieron verbalmente a la jefa de Fotografía de La Región, Deysi Peña.
“En lo que comenzaron a perseguir a los estudiantes y golpearon a dos, un efectivo raso me gritó un par de groserías y quería decomisarme la cámara, a lo que le respondí que así como él estaba trabajando yo hacía lo mismo, que respetara (…) Lamentablemente los insultos se han convertido en parte del trabajo, ni siquiera mi condición de fémina es respetada”, añadió la reportera gráfica, quien en otro hecho similar en días anteriores debió buscar refugio para no ser retenida como otros dos compañeros que fueron obligados a borrar las imágenes captadas.
-En esa ocasión, en marzo, tuve que desarmar la cámara y esconderla por partes, además de correr; afortunadamente unos vecinos me ayudaron. Es un trabajo complicado, pero cuando se tiene pasión por el oficio se hace lo que sea para reflejar lo que está ocurriendo, aunque eso signifique poner en riesgo la integridad física.
Exigencias contra la impunidad
Ante todas las embestidas hechas públicas, el OVCS e IPYS Venezuela se pronunciaron para rechazar de manera contundente las agresiones contra medios y periodistas en el marco de la cobertura informativa de las manifestaciones de calle que se registran en el país.
Además, instan al Estado venezolano a garantizar las medidas necesarias para que la prensa realice su labor sin ningún tipo de riesgos, amenazas ni presiones.
Añaden que estas prácticas deben ser acompañadas por investigaciones y sanciones pertinentes y oportunas que garanticen la justicia, los derechos humanos y eviten el aumento de la impunidad.
En el sitio www.mapadeprotestas.com puede ver los lugares donde periodistas y medios fueron víctimas de grupos paramilitares.
Johana Rodríguez – [email protected]/@michellejrl