
La avenida Bolívar de la capital mirandina sigue siendo, a pesar de los planes de seguridad anunciados e implementados por el gobierno municipal, zona roja. Vecinos y comerciantes denuncian constantes atracos armados cuyos protagonistas siguen siendo motorizados.
“A plena luz del día atracan a la gente”, reseñó este miércoles Margarita Acosta, habitante de la residencias Trigo Dorado, cercanas a la transitada avenida tequeña. “Ayer fui testigo de cómo un motorizado, que por cierto tenía un chaleco de mototaxistas, atracaba a una niña de no más de 14 años en plena parada”, dijo la mujer.
Los comerciantes de la zona no escapan a la situación. “Las víctimas corren desesperadas huyendo de los atracadores”, narró Alberto Monasterio, encargado de un kiosco de la zona. “El tramo más peligro de la avenida es el que va desde el liceo Miranda hasta las residencias Trigo Dorado”, dijo.
Aseguran que el problema no es solamente la falta de vigilancia policial. “Están quemados todos los bombillos de los postes, desde residencias Caracas hasta el final de la vía esto es una boca de lobo al caer la noche”, denunció Monasterio.
Para quienes deben caminar desde la estación Guaicaipuro hasta cualquiera de las edificios residenciales que se encuentran en la zona son el objetivo principal del hampa. “Uno siente terror cuando escucha que se acerca un motorizado, y lo peor es la indefensión en la que uno se encuentra, pues no hay un solo policía en la zona”.
Denuncian que tanto Corpoelec como la Alcaldía de Guaicaipuro hacen caso omiso a las cartas y llamados públicos que hacen los vecinos para activar de nuevo el alumbrado público. “La avenida Bolívar de la ciudad es la triste realidad que atraviesa la capital del estado Miranda”, puntualizó.
Daniel Murolo – [email protected] / @dmurolo