Trascendió que los agraviados, todos tiroteados, eran residentes de Tácata. Los cuatro hombres tenían tres días sin volver a sus hogares.
Maniatados y con disparos en la cabeza fueron hallados cuatro cadáveres en una zona boscosa de la parroquia Paracotos, por lo que autoridades iniciaron de inmediato las investigaciones correspondientes para esclarecer el caso.
Vecinos del lugar fueron alertados por un olor desagradable y al ubicar los cuerpos evidentemente ajusticiados, dieron parte a las autoridades policiales de forma inmediata.
Al lugar se hicieron presentes comisiones de la Policía de Miranda (Polimiranda) y sabuesos del Eje contra Homicidios del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc), quienes indicaron que las primeras pesquisas arrojaron que se trató de un ajusticiamiento por las características de la escena; sin embargo, trascendió que los investigadores esperan determinar en los próximos días si los homicidios se ejecutaron en ese lugar o los cadáveres fueron liberados en dicha zona.
Los cuerpos fueron trasladados hasta la medicatura forense local, donde los expertos realizaron los estudios de rigor, ya que para el momento del hallazgo las víctimas no portaban documentos de identificación.
El padre de uno de los sujetos abatidos identificó a su familiar y ofreció el nombre de los demás a las autoridades policiales; además agregó que los infortunados eran residentes de la población de Tácata en Guaicaipuro.
Las víctimas fueron identificadas como Armando Jiménez González, José de Jesús Contreras Rojas, Carlos Velásquez y Yoender Seijas. De forma extraoficial se conoció que los hombres se encontraban desaparecidos desde el pasado 15 de octubre.
Yhanny Casares
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