En tiendas de piezas usadas se pueden hacer hallazgos de Bs. 600, ganándose la preferencia de quienes se niegan a no comprarle vestimenta a sus pequeños de cara a la llegada del Niño Jesús.
Estresante. Así se ha tornado la víspera decembrina debido a los altos costos de la ropa, que hacen que adquirir estrenos sea una tarea titánica que pocos podrán cumplir, a menos no de la manera tradicional.
“Tengo dos chamas que andan entrando a la adolescencia. Aparte de que han perdido la ropa porque se han estirado y tienen curvas, quieren estar a la moda pero cada vez que entramos en alguna de sus tiendas favoritas en algún centro comercial me quedo fría al ver que una blusa común y corriente marca Bs. 25 mil; ni con dos sueldos mínimos me alcanza para una pieza, es una incoherencia lo que estamos viviendo”, relató Jennifer Álvarez, vecina de Carrizal.
–Mientras desahogaba mis penas con una amiga me confesó que descubrió una tienda de segunda mano en el Centro Empresarial El Coliseo, San Antonio de Los Altos, donde ha realizado hallazgos de piezas hasta por Bs. 600.
La tendencia está cobrando auge en los Alto Mirandinos, así como en Caracas, donde han proliferado estos negocios que cada año tienen más presencia en las ferias navideñas que muchos esperan instalar después de los comicios parlamentarios.
“Yo me jubilé y tengo muchos trajes taller, tacones y carteras en muy buen estado que sé que no volveré a utilizar, así que me sumé a uno de los Mercados de los Corotos realizado en Los Salias y me fue tan bien que ahora vendo piezas de segunda mano a través de mis redes sociales. Aspiro tener una sede física”, dijo Bárbara Cordero, comerciante.
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