En la urbanización Cecilio Acosta de Los Teques están “tragando tierra” desde noviembre, los trabajos inconclusos de reparación de las aguas servidas en la entrada del polideportivo tiene a la populosa zona sumergida en una densa capa de tierra.
“Rompieron toda la calle en un día y ya hoy sigue igual”, responde una de las vecinas de los bloques que conforman el referido sector tequeño conocido como El Paso. La zanja hecha en la localidad trae como consecuencia que las camionetas por puesto y los carros particulares no puedan transitar cómodamente.
“Seguimos esperando que reparen la calle correctamente”, agrega la mujer, adicionalmente dejaron los escombros en el sitio ocasionando gran malestar ya que eta área es utilizada por una gran cantidad de personas que en sus ratos libres desean realizar actividades deportivas en el Polideportivo Arnaldo Arocha.
Pero no solo se quejan por el “tierrero” que hay en la zona y que con la fuerte sequía empeora la situación, sino que aunado a esto está la problemática del alumbrado, ya que en ocasiones parece una “boca de lobo”.
Según Carmen González, residente de El Paso, “ya a partir de las 6:00 pm es mejor no andar por ahí porque los zagaletones se esconden en los escombros y en plena oscuridad te atracan”.
Denuncian además la presencia de motorizados armados que atracan y roban a los vecinos a pesar de que a pocos metros se encuentra la sede del Cuerpo de Investigaciones Cientificas Penales y Criminalisticas (Cicpc).
“Lo unico que medio funciona en esta zona es el polideportivo y eso que le falta iluminación”, reseñó otro de los vecinos. Cada día más de un centenar de personas procedentes de diferentes puntos de la ciudad acuden al centro deportivo para utilizar tanto la pista de atletismo para correr o caminar, como la cancha de fútbol.
“Al caer la noche la oscuridad se apodera de esto, en las gradas quedan cuando mucho solo dos bombillos encendidos, el resto se quemaron; esa es laúnica iluminación que tiene todo el polideportivo”, narró Eduardo Briceño, atleta que utiliza al menos tres veces a la semana la pista.
Además denuncian que los trabajos inconclusos en la entrada impiden que los visitantes puedan estacionar sus vehículos cerca; “si le sumas a eso la oscuridad y la delincuencia, lo que obtienes es que cada vez menos personas vienen en las tardes – noches por miedo a ser robadas”, narró.
Tanto la comunidad deportiva como los habitantes de El Paso, una de las urbanizaciones más grandes de los Altos Mirandinos, exigen a las autoridades culminar los trabajos que comenzaron en noviembre, así como garantizar seguridad en todos los bloques que conforman la comunidad tequeña.
El Polideportivo «Arnaldo Arocha» fue remodelado el 30 de abril de 2011 por el gobierno del estado Miranda, es un estadio utilizado principalmente para la práctica de deportes como el fútbol y el atletismo.
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Trabajo comunitario
Sirviendo de “puente” entre la comunidad y las autoridades, los estudiantes del quinto semestre de Publicidad del Instituto Universitario de Teconologia y Administración (IUTA), María Isabel Mijares y Otilio Infante, recorren las comunidades de los Altos Mirandinos recogiendo inquietudes que posteriormente procesan y entregan al equipo de La Pluma en el Barrio del diario La Región para su publicación.
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Daniel Murolo – [email protected] / @dmurolo
