El jefe rebelde, cuyo nombre es Rodrigo Londoño, indicó que el hecho ocurrió al mismo tiempo en que otra comisión de las FARC encabezada por Iván Marquez Joaquín Gómez y Jesús Santrich, visitó el corregimiento de Conejo
El ejército atacó a mediados de febrero un grupo de guerrilleros de las FARC en el Magdalena Medio, norte de Colombia, cuando iba a reunirse con un negociador de paz que les explicaría el avance de las conversaciones, dijo Timochenko, máximo jefe de esa organización.
«Nuestra gente actuó con mucha calma y serenidad, disparando al aire para no matar y gritando que eran de las FARC y que iban a lo que iban (…) ahí quedamos con cinco heridos», dijo Timochenko en declaraciones al diario El Tiempo publicadas este domingo.
El jefe rebelde, cuyo nombre es Rodrigo Londoño, indicó que el hecho ocurrió al mismo tiempo en que otra comisión de las FARC encabezada por Iván Marquez Joaquín Gómez y Jesús Santrich, visitó el corregimiento de Conejo, en el norte departamento de La Guajira, el 17 de febrero.
Esa visita, donde también habría un acto de pedagogía con la tropa rebelde para explicar los avances del proceso que las FARC y el gobierno sostienen en La Habana de 2012, desató una crisis en las conversaciones por la presencia de guerrilleros armados en medio de la población civil.
«En el momento en que nos estaban acusando de violar el protocolo, ellos (el gobierno) sí estaban violando los protocolos porque simultáneamente tendría que haberse ido ‘Pastor Alape’ para el Magdalena Medio, pero unilateralmente detuvieron el viaje de Pastor», dijo Timochenko.
Añadió que los guerrilleros que se encontrarían con Alape no pudieron ser avisados de la cancelación de la reunión y cuando se dirigían al sitio del encuentro fueron atacados por la patrulla militar.
Timochenko indicó que en el caso de El Conejo, acepta que «nos excedimos» y advirtió que en la medida en que avanza el proceso «los riesgos son más reales, e incluso las dificultades pequeñas se ven máximas y se pueden presentar situaciones bien difíciles».
Para el jefe rebelde dijo que la crisis por el suceso en La Guajira se pudo evitar si el gobierno hubiera hablado directamente con las FARC.
«Yo habría estado dispuesto a salir públicamente a decir: ‘Nos equivocamos, pedimos disculpas, esto no se va a volver a dar’. Habríamos hecho eso sin tanta espectacularidad», indicó.
Timochenko indicó que pese a las dificultades las dos delegaciones están trabajando fuertemente, pero advirtió que es muy difícil que se logre firmar un acuerdo el 23 de marzo que se anunció a finales del año pasado.
«Incluso en eso hasta ya tenemos coincidencia con el Gobierno: no vamos a trabajar sobre la presión de una fecha, vamos a trabajar para sacar adelante lo que tenemos. Hay cosas muy adelantadas, ya es darles como el puntillazo final. Estamos en eso», aseguró. Coincidió con el presidente Juan Manuel Santos, quien afirmó que prefiere un buen acuerdo antes que tratar de cumplir con el cronograma inicial.
AFP