
“Amanecí aquí y de aquí nadie me mueve hasta poder llevar leche para mis hijos”, gritaba la mañana de ayer una de las tantas madres que en víspera de su día esperaba su turno y rezaba para que alcanzara para todos.
Ayer unas dos mil personas amanecieron frente al supermercado Fresco Market, ubicado en el sector Corralito de la carretera Panamericana, con un solo objetivo: poder comprar al menos un articulo de los productos que serían vendidos tras ser hallados “acaparados” en galpones de la referida empresa.




