
El pasado viernes un robo a un camión que despacharía arroz al supermercado Pimenta dejó a los comerciantes sin la mitad de la mercancía que habían pagado a la empresa. La productora de alimentos no se hizo responsable del despacho, pues les señalaron que al salir de planta ya no es competencia de ellos el cargamento.
El robo fue de 200 pacas de las casi 600 que compraron a la empresa. Al menos 33 % de la carga la perdieron los comerciantes que ya habían pagado el despacho completo.
Casos como este se repiten en varias comercializadoras mayoristas. Al parecer la medida obedece a los intentos y saqueos a estos vehículos de carga en las carreteras mirandinas y de otras localidades.
La pasada semana un camión de harina de maíz fue saqueado en Paracotos, Igual suerte corrió otro que volcó en la Autopista Regional del Centro; le robaron la carga los vecinos. Estos hechos han obligado a las empresas a no responsabilizarse por estos despachos.
María Aldana, comerciante, señala que al pagar el envío le dijeron que no se hacían responsable de la carga.
Los cuerpos de seguridad en este caso del supermercado Pimenta hicieron la inspección del camión con lo que quedó de la carga, estacionado frente al comercio y se les permitió a los comerciantes vender la mercancía que esperaban cientos de compradores en larga fila a las afueras del local.
El domingo 5 de junio se registró un accidente en la autopista Valencia –Tocuyito, donde volcó un camión cargado de queso que posteriormente fue saqueado por un grupo de más de 100 personas. Ese mismo día saquearon un camión cargado de refrescos que se encontraba accidentado en la carretera Lara-Zulia.
Por esas calles el asalto a camiones que circulan para surtir de mercancía a los establecimientos es un secreto a voces.
Uno de los nuevos modus operandi de las bandas que roban comida y camiones de carga es neutralizar a los choferes, obligarlos a abrir las puertas de sus camiones y despojarlos del cargamento. Otro es conducir mientras es desvalijado por “pirañas”, sujetos ágiles que se trepan en las puertas, pican los candados y descargan la mercancía con el vehículo aún en movimiento.
Una de las opciones que han tomado algunos comercios pero que obviamente es más costosa, es contratar escoltas temporales para resguardar la mercancía; el servicio corre por cuenta de la empresa productora y repercute en un incremento sobre el precio de venta al consumidor de los productos.gf
Pola Del Giudice [email protected]/@polita26