En el sector Terrazas de Canaán en Los Teques, aún quedan algunos seguidores del gobierno nacional que siguen a la espera de que la gota de petróleo que prometió la “revolución” los toque.
Sin embargo, a muchos la paciencia se les tornó en decepción porque llevan 8 años como comunidad constituida y siguen sin servicios públicos. En la vivienda de Wilmer Polanco, no llega el agua y el servicio eléctrico funciona con deficiencias.
“No puedo tener aparatos eléctricos enchufados, pues siempre se sobrecarga la energía y ya se quemó un televisor”. Con suerte dice que puede encender uno o dos bombillos para iluminar el espacio en el que habita con su esposa y sus hijos.
Aunado a la problemática de electrificación y alumbrado público, jamás los vecinos del sector han visto salir agua por las tuberías de su hogar.
“Aquí cada familia tiene que resolver llenando uno que otro pipote. En reiteradas oportunidades hemos ido a Hidrocapital (órgano encargado de suministrar el agua) a que nos solucione el problema y no nos dan respuesta alguna. La Gobernación nos mete la mano con el envío de camiones cisternas para que podamos tener agua”, comentó.
Las cerca de 300 familias que habitan en Terrazas de Canaán, en el municipio Guaicaipuro, forman parte de ese 38 % que no tiene acceso continuo en Venezuela al vital líquido, según refiere un estudio de Encovi.
Esta semana, durante un gabinete parroquial efectuado en dicha comunidad, el gobernador de Miranda, Henrique Capriles, supervisó la ejecución de tres obras de infraestructura social en el lugar y asumió el compromiso de mejorar la electrificación de la zona, pues sus habitantes aseguran que en las noches, los caminos de tierra por los que transitan parecen una “cueva de lobo”./NDP