
Al menos 80 % han caído las ventas de comida en la calle en comercios tequeños; la disminución se debe a la escasez y aumento de los alimentos, pues a las personas todo lo que ganan se les va en pagar la cesta básica.
Las salidas de los fines de semana en familia se han reducido en la ciudad. Andrés Márquez señaló que antes iba a comer una vez a la quincena con sus hijos y esposa pizzas, perro calientes o pollo con papitas fritas en la calle, pero ante el aumento de los precios ya no puede hacerlo.
“En lo que va de año no hemos salido la primera vez, prefiero lo que voy a gastar en un restaurante comprarlo en comida para la familia. Hace poco solo en helados gasté 12 mil bolívares”.
Para Márquez la parte recreativa es una de las áreas que más se ha visto afectada en las familias venezolanas; “ya ni un dulce se puede llevar para el hogar, los de panadería no bajan de cuatro mil bolívares y somos cuatro personas“.
También señaló que los refrescos de dos litros cuestan cuatro mil bolívares; por eso “tampoco compro bebidas de colores para acompañar los alimentos“.
–Todo el dinero se va en comprar comida para preparar el desayuno, almuerzo y cena; lo que queda es para los gastos de movilización y las medicinas que necesita mi esposa.gf
Beatriz Hernández