Apagones sentencian a la quiebra a locales altomirandinos

Comercios de los Altos Mirandinos cerrados

«No nos podemos acostumbra a este desastre», sentenciaba la mañana de este miércoles Mariana Sánchez, vecina de la urbanización La Morita de San Antonio de los Altos, tras contabilizar más de 4 horas sin energía eléctrica.

«Llegó en La Morita y se fue en Las Minas, ya están racionando el servicio y son incapaces de informar a la gente para prepararse», agregaba visiblemente molesta Olga Vargas.

Quienes salieron a las calles se encontraron con un panorama que no ha cambiado en una semana: comercios cerrados o trabajando a media máquina, radios fuera del aire y largas colas frente a los locales que cuentan con planta eléctrica.

La prioridad de los habitantes de la región altomirandina sigue siendo conseguir agua y adquirir alimentos que no se dañen por falta de energía.

«Estoy comprando a diario lo que comemos en mi casa, ya perdí la carne y pollo que tenia en la nevera, esto es un desastre», explicaba María Fernanda González.

Las tuberías secas, ante la falta de bombeo por parte de Hidrocapital, obligó el lunes a los habitantes del barrio Brisas de Oriente de Carrizal a «secuestrar» cuanto camión cisterna pasara por la Panamericana desviandolo al popular sector.

«Ya ni sé cuando fue la última vez que nos llegó agua y el alcalde de aquí [Carrizal] lo que haces es amenazar y no resuelve», agregó uno de los carrizaleños que se sumó a la protesta.

En Los Teques los pocos comercios abiertos reportan ventas nulas, «sin luz no hay punto de venta y nadie tiene dinero para comprar en efectivo, este gobierno nos sentenció a la quiebra», indicó un comerciante.

El martes al menos cuatro protestas se registraron solamente en Los Teques, donde vecinos trancaron la Panamericana. La mañana del miércoles zonas de El Panadero, La Estrella y El Rincón protestaban por falta de agua. 

Daniel Murolo

Salir de la versión móvil