La mascarilla dejará de ser obligatoria en lugares al aire libre poco concurridos en Bélgica, que además reducirá de catorce a siete días la cuarentena preventiva para quienes no tengan síntomas de la COVID-19, pero hayan estado en contacto cercano y sin protección con un caso positivo.
Estas son dos de las medidas anunciadas este miércoles en una conferencia de prensa por la primera ministra belga en funciones, Sophie Wilmès, tras una reunión de varias horas del Consejo Nacional de Seguridad (CNS), del que forman parte la jefa de Gobierno, varios de sus ministros, autoridades regionales y científicos
Según las nuevas normas, quien haya tenido ese tipo de contacto deberá aislarse durante siete días y someterse a un único test de diagnóstico al quinto.
En caso de que el resultado sea negativo, podrá abandonar el aislamiento, pero si da positivo deberá permanecer en cuarentena siete días más, aunque no presente síntomas de la enfermedad.
La medida no se aplica a quienes sí tengan síntomas de la COVID-19, que deberán aislarse y ponerse en contacto con su médico para someterse al test «lo antes posible».
La decisión de Bélgica, similar a la que ya se aplica en Hungría, Polonia, Francia o España, entrará en vigor el 25 de septiembre.
Con información de: globovisión.com
