En los próximos días, el juez del histórico caso decidirá cuántos años de cárcel corresponden al policía. El policía Derek Chauvin es culpable de haber matado a George Floyd. Así lo ha decidido el jurado de 14 personas de su juicio, en una decisión alcanzada tras sólo un día deliberación, lo que significa que ha habido pocas dudas acerca del dictamen. El dictamen es que Chauvin es culpable de los tres cargos en su contra. En los próximos días, el juez del caso, Peter Cahill, decidirá cuántos años de cárcel corresponden a Chauvin, que podría apelar la sentencia, sobre todo tras la injerencia política en el juicio en los últimos días. Chauvin tenía tres cargos. El más grave es asesinato no intencionado en segundo grado, que significa que su intención era causar un daño físico a la víctima, pero no su muerte.
Tras ése estaba asesinato en tercer grado, que es «perpetrar un daño a otros» con «mente depravada y desprecio por la vida humana». La imprudencia temeraria en segundo grado «es cuando se crea un riesgo que no es razonable y, de manera consciente, se adoptan decisiones que pueden causar la muerte o un grave daño físico». Chauvin podría ser condenado a un máximo de 75 años de cárcel (40 por asesinato en segundo grado; 25 por asesinato en tercer grado y 10 por causar la muerte por imprudencia). Pero eso parece improbable, dado que Chauvin no tiene antecedentes penales. Oficialmente, el estado de Minnesota recomienda doce años y medio para cada cargo de asesinato y cuatro por el de imprudencia temeraria. Eso implica unos 29 años como máximo. Chauvin tiene 45 años. Pero eso es competencia del juez del caso. Es un veredicto histórico. El jurado ha decidido en un caso que desencadenó docenas de muertos en los disturbios, con los miles de millones destruidos y saqueados, y la mayor crisis racial del país en 52 años.
Ése es el verdadero legado de los 8 minutos y 46 segundos que Chauvin mantuvo su rodilla izquierda sobre el cuello de Floyd causándole la muerte por asfixia. Un veredicto que culmina una oleada de violencia que las autoridades temían que se volviera a desbordar, hasta el punto de que el Ejército estaba listo para ser desplegado en las ciudades de Washington, Nueva York y Chicago, así como en todo el estado de Illinois. En Minneapolis, ya estaban desplegados 3.000 militares desde que había comenzado el juicio. Las catorce personas del jurado -ocho, blancas, seis de otras razas; nueve, mujeres; cinco, hombres -tenían en sus manos a EEUU. La tensión era palpable en la actitud de los políticos. En especial los del Partido Demócrata, que ahora están en el poder, pero que eran la oposición el 25 de mayo pasado, cuando Chauvin mató a Floyd. Una vez conocida la sentencia, el presidente de Estados Unidos celebró que se haya hecho «justicia», durante una llamada telefónica con el hermano de Floyd, Philonise, que fue grabada en vídeo y publicada en Twitter por el abogado de la familia, Ben Crump.
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