Cuatro venezolanos que operaban entre el sur de Florida, en Estados Unidos, y México fueron acusados de robar hasta unos 800 mil dólares en cheques de estímulo emitidos por el Gobierno con el fin de mitigar los efectos económicos de la población durante la pandemia de la Covid-19.
Uno de ellos, Jesús Felipe Linares Andrade, está detenido y enfrenta un cargo por conspirar para robar dinero del Gobierno por medio del robo de identidad, informó este miércoles el diario Miami Herald, que señala que es el primer caso de este tipo que se investiga en Florida.
De acuerdo a la acusación, Linares y otros tres venezolanos, no identificados por las autoridades, robaron los cheques emitidos por el gubernamental Departamento del Tesoro y los cobraron a través de documentos de identidad fraudulentos.
La red logró robar, sin que se precise cómo, los cheques en el sur de Florida y en México, y fabricaron documentos de identidad que se correspondían con los destinatarios de la ayuda económica aprobada por el Gobierno en una serie de rondas.
El venezolano, ingresado en prisión desde mayo y sin derecho a fianza, fue detenido como resultado de una operación encubierta del FBI.
Zelle
Informantes de esa agencia federal interactuaron con los miembros de esta operación en más de una ocasión a lo largo de este año, la primera de ellas en enero en el estacionamiento del popular centro comercial Aventura Mall, al norte de Miami.
De acuerdo al fiscal federal adjunto Michael Berger, en aquella oportunidad discutieron como cobrar 30 cheques, cada uno de ellos de mil 200 dólares y a nombre de contribuyentes con direcciones postales en México.
Parte de esos 36 mil dólares fueron transferidos a Linares a través de la aplicación móvil Zelle.
Otro encuentro se dio en abril en un centro comercial de Doral, ciudad al oeste de Miami, en la que se acordó que Linares recogería en una casilla postal de Deerfield Beach, en el sur de Florida, una caja con 416 cheques, equivalentes a casi 250 mil dólares, y la pondría en el maletero de un carro que sería conducido por dos informantes del FBI.
Ese mismo mes, Linares coordinó con los dos informantes la recepción de alrededor de más de 34 mil 476 dólares en «fondos lavados» de los cheques de estímulo, la entrega de 226 cheques adicionales por un monto aproximado de 135 mil dólares, y el envío de documentos de identidad que se usarían para cobrar los cheques, recoge el diario.
Entre los documentos figuraban copias de las licencias de conducir, alguna de ellas de licencias de Florida, con nombres que coincidían con los nombres de los cheques emitidos por el Departamento del Tesoro.
Linares se declaró no culpable.