Con el sueldo mínimo de enero de 2017, 40 mil bolívares un venezolano en la actualidad no puede comprar ni un desayuno en la calle y con el ingreso mínimo actual debe reunir casi 3 días de paga para comerse una empanada con un jugo.
Dependiendo del tamaño y el guiso, la empanadas que se consiguen en Los Teques, cuestan entre 30 y 35 mil bolívares, si la opción es comprar un pastelito debe pagar 30 mil bolívares, mientras las arepas salen entre 40 y 50 mil bolívares.
Ahora bien, a pesar de los ajustes de precios los vendedores de desayunos refieren que es toda una odisea conseguir los ingredientes bien sea, harina de maíz, harina de trigo, aceite, mantequilla y hasta el azúcar para el jugo.
Petra Zambrano, recalcó que desde hace 16 años, se gana la vida haciendo desayunos, sin embargo comentó que la situación actual es muy crítica, al punto que algunos días ha dejado de abrir.
«La harina de trigo la importada se consigue en 90 mil bolívares con eso hago los pasteles, pero para hacer las arepas y empanadas el asunto es más complejo por la harina de maíz, por eso me buscó redondear vendiendo chucherías», aseveró Zambrano.
Finalizó indicando que los clientes aunque entienden la situación se quejan por los precios y han dejado de comprar.
