
Desde tempranas horas de la mañana una larga fila de personas se formó a las afueras de un local expendedor de alimentos, ubicado en la calle Ribas, en donde llegó un pedido de artículos como harina de maíz, aceite, jabón en panela y lavaplatos, los cuales en su mayoría continúan escaseando en la todos los anaqueles a nivel nacional.
La trifulca se originó debido a que los productos tardaron en ser vendidos por los dueños de la tienda, según informaron los compradores, por lo que la ira se apoderó de ellos y comenzaron a amenazar con trancar la calle para exigir la venta de los alimentos inmediatamente.
“Los ánimos se caldearon cuando vimos que ya eran las 9:00 a.m. y no habían comenzado a atender a las personas, eso es algo ilógico porque desde las 6:00 a.m. había ya una larga fila para poder adquirir los productos que llegaron. Hubo intercambio de gritos y hasta íbamos a trancar la calle para exigir nuestros derechos”, declaró Pedro Carvajal.
Sin embargo, los efectivos de Polimiranda hicieron inmediatamente acto de presencia en la zona para poder calmar a las personas y dialogar con los encargados del local para que así comenzaran a atender a los clientes y evitar mayores inconvenientes.
“Sino es por la policía los dueños iban a bajar la santamaría en nuestra cara, porque son unos abusadores. Hacemos un llamado al alcalde Francisco Garcés para que meta la lupa en este asunto”, dijo Carvajal.
Comerciantes a merced de agresiones
Según manifiestan algunos encargados de ciertos supermercados, locales y bodegas de la ciudad capital las agresiones hacia ellos y los demás trabajadores de los recintos se acentúan cuando llegan productos como la leche en polvo, por lo que afirman que se sienten más expuestos en dichos momentos.
Por tal motivo, los dueños de los locales expendedores de alimentos piden a las autoridades policiales y de seguridad el apoyo cuando lleguen ciertos tipos de productos a los anaqueles, para así evitar trifulcas y daños materiales a los negocios.
Ronald Gil- [email protected] / @thedaniels21