La diputada a la Asamblea Nacional María Corina Machado, acudió este miércoles a la sede principal del Consejo Nacional Electoral (CNE) para manifestar su rechazo a la postulación de Tibisay Lucena y Sandra Oblitas para un nuevo período en el organismo comicial y para emplazar a las cuatro rectoras, Lucena, Oblitas, D’Amelio y Hernández a que renuncien a sus cargos y así proceder al nombramiento de 5 nuevos rectores, realmente independientes e imparciales, como lo establece la Constitución”.
Para Machado, “es indignante que Lucena y Oblitas, pretendan volver a ser rectoras del CNE, ello demuestra la pretensión del régimen de insistir en controlar todas las instituciones y es una bofetada para todo el país, en especial para quienes tuvieron alguna esperanza en todo el procedimiento del Comité de Postulaciones Electorales.”
Asimismo, Machado denunció que “desde el inicio era previsible hacia donde pretendían ir; la misma conformación del Comité de Postulaciones Electorales (CPE) se hizo con una clara mayoría oficialista, contrariando la Constitución. El CPE ya ha demostrado su sumisión al PSUV al asumir decisiones por mayoría simple y extendiendo injustificadamente el periodo de postulaciones.
La líder de Vente Venezuela considera que “el desempeño de esta directiva es vergonzoso y el país exige un órgano electoral que genere credibilidad y confianza para los próximos procesos electorales que se avecinan. Al constatar los abusos y atropellos cometidos en estos años, es evidente la responsabilidad directa de estas rectoras en los mínimos niveles de credibilidad y confianza que tiene el CNE en la población venezolana; no sólo en la casi totalidad de los opositores, sino también en una amplia porción de los seguidores del oficialismo.”
Estas rectoras incurrieron en violaciones a su mandato constitucional cuando entre otras cosas, han:
- permitido el uso corrupto de los recursos del Estado para proselitismo electoral, tal como lo hemos visto todos los venezolanos y lo confesó el propio ex ministro Jorge Giordani,
- Corrompido el registro electoral, convirtiéndolo en una caja negra, donde nadie puede auditar quiénes votan, y donde se incorporan masivas migraciones inconsultas,
- Sembrado intencionalmente el miedo en los electores, provocando profundas dudas en el secreto del voto lo cual coarta la libertad de elegir
- Negado a abrir las cajas y a contar los votos, incluso después de haberse comprometido a ello con la comunidad internacional
- Cambiado el cronograma electoral como les ha dado la gana y ajustándolo a su conveniencia, adelantando y postergando elecciones, como en el caso de los concejos municipales, retrasadas 4 años y medio, y la de las juntas parroquiales, que fueron eliminadas.
- Modificado los reglamentos y procedimientos a su antojo, incluso retroactivamente; el caso más evidente es el cambio de los circuitos para las elecciones parlamentarias.
- Igualmente, de manera discrecional y arbitraria, han aprobado, negado o postergado la inscripción de nuevas organizaciones políticas, como es el caso de Marea Socialista y Vente Venezuela. Estas organizaciones han cumplido con todos los requisitos y se niegan a inscribirnos formalmente como partidos políticos.
Es por esto que hoy decimos, ni 1, ni 2, ni 3, ni 4, son los 5 rectores los que deben cumplir con la Constitución, siendo imparciales e independientes. Es hora de que se vayan todos quienes han defraudado al país. El próximo CNE tendrá una máxima responsabilidad ya que deberá acompañar la transición a la democracia en paz. Por eso, rectoras, renuncien y háganle el mejor servicio al país.