Comisiones de la Policía Nacional Bolivariana (PNB), Polimiranda, Polisalias y Poliguaicaipuro se movilizaron hasta la sede que lució custodiada toda la mañana de ayer.
Un intento de fuga en los calabozos de la Policía de Carrizal (Policarrizal), activó las alarmas en Polisalias, Poliguaicaipuro, Polinacional, Polimiranda y GNB, quienes desplegaron un operativo de seguridad en las inmediaciones de la sede policial, la mañana de este lunes.
Los privados de libertad, quienes tomaron la actitud violenta para llamar la atención de las autoridades, rompieron a golpes una pared de donde sacaron las piedras con las que agredieron a la comisión policial que ingresó al recinto para mediar.
Winston Rodríguez, jefe de operaciones de Policarrizal, liderizó la comisión por lo que los detenidos intenteron secuestrarlo, sin embargo solo recibió pedradas y logró evadir la acción delictiva de los privados. Otros dos uniformados también resultaron lesionados.
El hecho se registró luego de las 9:00 a.m y se extendió hasta pasadas las 12 del mediodía de este lunes, cuando se hizo presente el Fiscal del Ministerio Público (MP), Yonny Hernández y se entrevistó con los reclusos.
Entre los petitorios que expusieron los privados de libertad destaca el traslado inmediato para quienes ya se encuentran en situación de penados, así como la extensión del horario de visita.
Julio González, director de Policarrizal, declaró que “aquí se garantizan los Derechos Humanos. Algunos de ellos, que ya estuvieron presos, nos dicen que aquí se les garantizan sus derechos como no sucedía en otros lugares. Estuvimos en presencia de una acción de fuga que gracias a la acción eficiente de nuestros funcionarios fue solventada”.
Denuncian los familiares
En las afueras del recinto policial se hicieron presentes familiares de los detenidos, quienes aprovecharon la oportunidad para denunciar violaciones de derechos por parte de los funcionarios.
“Son tres uniformados que se han encargado de maltratar a los detenidos y a sus familiares, nos prohíben las visitas sin razón alguna y hasta nos amenzanan de matarnos si decimos algo”, declaró Rafael Silvera, familiar.
–A mi sobrino lo tienen detenido sin pruebas desde hace dos meses, está herido en el fémur y no ha recibido tratamiento, le quitaron sus muletas y permanece en los calabozos aún sin tener pruebas-, añadió.
Silvera agregó que “ya el hecho de estar detenido es malo, pero si además le sumas los maltratos de los que son víctimas por parte de los policías, ellos y sus familiares, la situación empeora”.
Con respecto al tema de la visita, familiares indicaron que pese a que legalmente deberían ser dos horas diarias, desde hace un mes tienen solo un día de visita a la semana y solo algunos minutos.
El entrevistado resaltó que son tres lo funcionarios que se han dado la tarea de agredir a los privados y a sus familiares, pero han abierto la denuncia en la Fiscalía de derechos fundamentales como como ante el Ministerio Público.
Yhanny Casares
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