El ejército israelí anuló un controvertido procedimiento que permitía usar una potencia de fuego masiva para evitar que soldados sean capturados con vida, dijo el martes a la AFP.
El jefe del Estado Mayor, el general Gadi Eisenkot, «ordenó el fin de este procedimiento», indicó una portavoz, sin dar más detalles.
El procedimiento «Hannibal» fue establecido en 1980, cuando Israel combatía contra el movimiento chiita libanés Hezbolá en el sur de Líbano.
Establecía que en caso de intento de secuestro de un soldado se intente rescatarlo por todos los medios, aunque se ponga en riesgo la vida del soldado.
Se cree que este procedimiento fue utilizado en Gaza en 2014 tras el secuestro del soldado Hadar Goldin.
Amnistía Internacional afirma que luego de que el soldado Goldin desapareciera Israel lanzó este protocolo, lanzando un potente ataque contra la ciudad de Rafah, en el sur de la Franja de Gaza, que mató a «al menos 135 civiles».
El teniente Goldin fue posteriormente declarado muerto.
Asa Kasher, que dirigió el comité de redacción del código de ética del ejército israelí, aplaudió la decisión que «debería haber sido tomada hace mucho tiempo».
Según él, los soldados malinterpretaron este procedimiento y lo consideraban como una orden de ejecución de sus compañeros de armas.
AFP