Según los registros arrojados durante esta semana en el Ambulatorio María Isabel de Rodríguez, ubicado en el casco central del municipio Carrizal, los casos atendidos de enfermedades respiratorias han bajado drásticamente, según informó la directora de salud Beatriz Fernández.
Dicha disminución de casos se debe principalmente a la escasez de medicamentos para enfermedades respiratorias que ha mermado desde principios de año en todas las farmacias de los Altos Mirandinos, poniendo en jaque a la población a nivel nacional.
“Como no hay medicamentos la gente viene más que todo a nebulizarse, aunque nosotros tenemos Aminofilina e Hidrocortisona, la gente está acostumbrada al Aloven o Salbutamol que no hay en todo el país, entonces no se nebulizan. Los pacientes llegan a la conclusión de para qué venir al ambulatorio sino hay medicamentos”, dijo Fernández.
Farmacias vacías
Por su parte, la farmecéutico Laurie Gil afirma que la mayoría de farmacias actualmente no cuentan con los medicamentos para atacar las enfermedades de las vías respiratorias, ya que cuando un paciente presenta asma o broncoespasmos se utiliza normalmente gotas como Berodual o Budecort, las cuales están desaparecidas desde el año pasado.
“He recibido este año solamente Budecort en tres oportunidades y ha venido una sola unidad. No hay broncodilatadores para niños por vía oral. Tampoco hay corticosteroides inhalados ni inyectables de ningún tipo, ni antiasmáticos en inhalador, ni Salbutamol”, puntualizó Gil.
Entre la larga lista de medicamentos respiratorios desaparecidos de las farmacias se encuentran también los antibióticos para niños y adultos que son para atacar las mismas, generalmente se utilizan las cefalosporinas como el Cedax en tabletas o suspensión o el Longacef en ambas presentaciones, peor ninguna ha llegado a los estantes farmacéuticos.
“Esto va de mal en peor, no podemos seguir viviendo en esta desidia. Al gobierno no le importa que la gente esté muriendo por falta de medicamentos, a ellos sólo les importa seguir en el poder. No es posible que en un país rico en petróleo como Venezuela no tenga medicinas para la tensión, para la gripe, ni para los pulmones. Es algo inaudito”, expresó Lidia Aponte, habitante de Carrizal que aseguró a ver “caminado” todas las farmacias altomirandinas en busca de unas gotas para el asma sin haber tenido suerte.
Ronald Gil
@thedaniels88