El Gobierno de Colombia, a través de la Cancillería, denunció este viernes que han tenido conocimiento de una intensificación de las amenazas contra Juan Guaidó, a quien reconocen como presidente interino de Venezuela, así como contra su familia.
«El Gobierno de Colombia ha tenido conocimiento de la existencia de serias y creíbles amenazas a la vida del presidente encargado de Venezuela, Juan Guaidó, y su familia, las cuales se han intensificado recientemente», según un comunicado de la Cancillería.
Asimismo, aseguran que Colombia «observará atentamente el curso de los acontecimientos y promoverá» dentro del Grupo de Lima «la activación de los mecanismos jurídicos y diplomáticos pertinentes» para que Guaidó y su familia «gocen de la efectiva protección de sus derechos y sus libertades».
Por otra parte, recordó que Guaidó «es beneficiario de medidas cautelares otorgadas por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH)».
La CIDH, órgano dedicado a velar por los derechos humanos en el continente americano, pidió el 25 de enero al Estado venezolano que proteja la vida de Guaidó y su familia y le concedió medidas cautelares, un instrumento que sirve para proteger a sus solicitantes ante el riesgo de que sufran un daño irreparable.
Al otorgarle esa protección, la CIDH afirmó que «los derechos a la vida e integridad» de Guaidó «se encuentran en una situación de riesgo» que podría verse «exacerbada» por «la agudización de la crisis política en el Estado de Venezuela«.
Finalmente, Colombia rechazó «todo acto del régimen de Nicolás Maduro en contra de la libertad, la seguridad y la integridad personal» de Guaidó o de sus familiares y «lo hace responsable por cualquier acción violenta o coacción contra ellos».
El pasado lunes, el Grupo de Lima ya denunció que había «informaciones serias y creíbles» de amenazas contra Guaidó y su familia.
«Queremos responsabilizar al usurpador Maduro de cualquier acción violenta contra Guaidó, su señora o sus familiares, lo cual se convertiría, no solamente en otro crimen, sino que daría lugar a una situación internacional que obligaría a actuar colectivamente al Grupo de Lima acudiendo a todos los mecanismos legales y políticos», dijo entonces el canciller colombiano, Carlos Holmes Trujillo.
El pasado 10 de febrero, Guaidó denunció que la abuela de su esposa, Fabiana Rosales, fue amedrentada por «colectivos», como se conocen a las organizaciones paramilitares de civiles habitualmente armados que actúan en defensa del chavismo.
La situación se produjo en el municipio de Tovar, en el estado de Mérida contra la mujer de 83 años.
El 31 de enero Guaidó también denunció que agentes de la policía fueron a su casa y preguntaron por su esposa, a quien esperaban interrogar pero ella no estaba.
Guaidó responsabilizó entonces al Gobierno de Nicolás Maduro por la seguridad de su familia y dijo que conoció la noticia gracias a la alerta de varios de sus vecinos. EFE