Nicolás Maduro expresó la noche del domingo 4 de agosto que considera necesaria la regulación de redes sociales como TikTok e Instagram, asegurando que estas plataformas multiplican «el odio y el fascismo». Este llamado a la regulación se da en un contexto de creciente tensión y persecución hacia periodistas y medios de comunicación en Venezuela desde las elecciones presidenciales del 28 de julio.
«Son los principales instrumentos multiplicadores del odio y del fascismo», consideró en una alocución, en la que hizo un llamado al Consejo de Seguridad y Consejo de Defensa de la nación para que le den «recomendaciones» al respecto.
Estos ataques han ido en ascenso, justamente para el 3 de agosto, los periodistas Frayber Rivas y Humberto Ambrosino alertaron que son víctimas de acusaciones en las redes sociales. Ambos comunicadores acudieron a la Fiscalía del estado Lara para que se realice la respectiva investigación sobre estas denuncias.
Ese mismo día, el medio digital ecuatoriano La Data Ec denunció la detención de la periodista Dayana Krays por parte del Gobierno de Nicolás Maduro. Krays se encontraba en Caracas cubriendo una concentración convocada por la opositora venezolana María Corina Machado cuando fue detenida. Estos incidentes reflejan una escalada en la represión y el control sobre la prensa y la libertad de expresión en el país
Los mecanismos de censura previa impuestos por Conatel contra medios de comunicación en Internet continuaron el pasado 2 de agosto. Tras la publicación de la carta de María Corina Machado en The Wall Street Journal la noche del jueves, el sitio web del medio fue bloqueado en Venezuela. También se conoció el bloqueo y cancelación del dominio de VersionFinal, medio de comunicación del estado Zulia. Ambos bloqueos fueron documentados y denunciados por el observatorio Vesinfiltro.
El periodista y director de The Objective, Álvaro Nieto, fue expulsado de Venezuela la noche del 2 de agosto. Nieto, quien llegaba para cubrir las incidencias post electorales, fue sometido a dos horas de interrogatorio antes de ser subido a un avión de retorno. «Es completamente anormal que a un ciudadano español se le impida el acceso a un país al que tiene derecho a viajar. Entiendo que se me expulsa por mi condición de periodista crítico con Nicolás Maduro», afirmó Nieto.
El 3 de agosto, Jonathan Maldonado, corresponsal de frontera de La Nación Web, fue intimidado. Desde el 29 de julio ha sido víctima de amenazas mediante panfletos, llamadas y mensajes de WhatsApp que buscan interrumpir su labor periodística en la zona. Ese viernes, el periodista recibió llamadas de números desconocidos y del extranjero, en las que lo amenazaban de que si no salía del país lo buscarían en su casa. Posteriormente, le enviaron un panfleto con el encabezado «operación tun tun».
Hacia Valle de la Pascua, estado Guárico, encapuchados presuntamente de la DGCIM detuvieron al periodista y dirigente político José Gregorio Camero después de una manifestación realizada por sectores de la oposición en el municipio Infante.
Asimismo, los medios de comunicación Nueva Esparta 920 y NotiEspartano fueron violentados la madrugada del 3 de agosto, causando daños a estanterías y otros espacios. La denuncia fue hecha ante el CICPC y ambos medios continúan al aire.
Estas agresiones han sido principalmente físicas y verbales e intimidación por parte de cuerpos policiales y grupos armados irregulares afectos al oficialismo, según balances del SNTP. Con esto asciende a ocho la cifra de profesionales venezolanos detenidos por parte de fuerzas de seguridad del Estado.
Con información de: Tal Cual