La ilusión de darle la bienvenida a un nuevo miembro a la familia puede verse ennegrecida con los precios del mercado que ubican una cama cuna entre 400 y 900 mil bolívares, modelo que puede alcanzar los 2 millones de bolívares dependiendo de los mobiliarios que incorpore.
“Los precios suben de un día para otro. En un negocio especializado en la carretera Panamericana el presupuesto de un juego de cuarto para un varón estaba en un millón 600 mil bolívares. Una semana después pasé para reservar y ya había aumentado a 700 mil”, afirmó Génesis Carmona, quien va por el primer trimestre de su embarazo.
–A diferencia de muchas mujeres que quedan embarazadas porque no encuentran las pastillas, este es un bebé deseado y planificado, por lo que desde el día que mi esposo y yo supimos que estábamos en la dulce espera comenzamos la búsqueda de pañales, leche, medicamentos y los implementos de higiene personal. Ya abastecidos, estamos en la búsqueda de todo lo que se necesita para acondicionar el cuarto y la verdad es que nos quedamos anonadados tanto con los precios como con la velocidad con los cuales los suben. Ya no dan presupuesto en los negocios a menos que reserves y aún así te dan un plazo de congelamiento del precio.
Los comerciantes señalan que debido a la mala calidad de los materiales nacionales tienen que echar mano de materia prima importada, lo que encarece los costos significativamente. “Sabemos que la situación económica está particularmente difícil, por lo cual se ofrecen planes de financiamiento que dan un margen de tres meses para que los clientes vayan abonando y la adquisición no se haga tan cuesta arriba”, precisó el entrevistado.
“Las ventas han caído más de 70 % porque la gente está enfocada en la compra de comida. Sin embargo, como dicen los economistas, siempre hay un nicho de mercado para quienes tienen cómo costear estos productos que son para toda la vida”, declaró el vendedor, quien solicitó el anonimato.gf
Johana Rodríguez [email protected]/@michellejrl
